lunes, 31 de enero de 2011

Ese tesoro

 Ya acabó enero.

 ¡Hay que ver lo rápido que pasa el tiempo! Esto, que parece un lugar común, no deja de ser una verdad como un templo. Las personas tenemos tendencia (unas más y otras menos) a fijarnos objetivos en el tiempo y a no disfrutar plenamente del trayecto hacia esas metas. Craso error. Si alguien está de acuerdo conmigo en que el tiempo pasa veloz, no podrá dejar de estarlo en que hay que aprovecharlo, disfrutarlo, exprimirlo lo más que podamos.

 Sería curioso hacer una encuesta a personas mayores de ochenta años con la siguiente pregunta: ¿tiene la sensación de que la vida ha pasado demasiado rápido? Creo que ganaría el sí por mucha diferencia, aunque solo es una opinión ya que no he hecho la pregunta a nadie; ¿y si añadiésemos otra pregunta? por ejemplo: ¿haría usted lo mismo que hizo a lo largo de su vida? Siguiendo con el ejercicio de imaginación creo que muchas de estas personas se arrepentirían de haber hecho cosas que supusieron una pérdida de tiempo.

 Tendemos a darle más importancia a este asunto "a toro pasado". Como a la salud la echamos de menos cuando falta, al tiempo lo valoramos más cuando ya es pretérito, cuando ya se nos ha escapado de las manos. Seamos conscientes pues de la verdadera importancia de utilizar las horas que tengamos por delante de la forma más provechosa posible. Que no lleguemos a la vejez con la sensación de haber "perdido" el tiempo. Cada cual tendrá sus formas preferidas de aprovecharlo.

 Por favor, hagámoslo.

 Continuará...

1 comentario:

  1. ya cariño pues haber si te aplicas tú..., piensa en el tiempo que empleas en pensar en el futuro sin disfrutar lo mejor que puedas tu día a día, aunque creas q es una "m" por el trabajo siempre hay algo por el q alegrase ' ¡la vida es bella!

    ResponderEliminar